5 lecciones atemporales de Marco Aurelio para una vida plena
Gran emperador romano e influyente estoico.
Marco Aurelio fue un emperador y filósofo romano. Lideró Roma desde el año 161 d.C hasta el año 180 d.C, cuando murió. Además de un reputado militar, fue uno de los mayores exponentes del estoicismo, la corriente filosófica en la que la razón, la virtud, el autocontrol, y la vida de acuerdo a la naturaleza son los pilares fundamentales.
El fin del estocismo es alcanzar lo que se denomina apatheia o la tranquilidad del alma a pesar de las circunstancias. Uno de los principios fundamentales es la no preocupación por lo que no se puede controlar para dedicar toda tu energía en lo que sí se puede controlar. Esto se denomina la dicotomía estoica del control.
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Las Meditaciones de Marco Aurelio
La escuela estoica fue fundada por Zenón de Citio, sobre el siglo III a.C. Epícteto, Séneca y el propio Marco Aurelio son los máximos exponentes de esta filosofía. Durante las guerras, Marco Aurelio escribía una especie de diario donde anotaba todos los aprendizajes y reflexiones sobre como debía vivirse una vida estoica y de autocontrol. Estos escritos no estaban llamados a ser publicados pero fueron conservados -no se sabe muy bien por quién-, y posteriormente publicados bajo el nombre de Ta eis heauton (A sí mismo). Estos escritos han llegado hasta nuestros días bajo el nombre de Meditaciones, y se han convertido ya en un auténtico manual de vida.
La primera vez que lo leí encontré reflexiones profundas pero francamente útiles, además de lecciones para conseguir una vida más centrada, calmada y enfocada. Este es mi propósito y uno de los propósitos de este espacio. Vuelvo a él de vez en cuando y siempre encuentro algo nuevo. Es un escrito en el que dependiendo en el momento vital en el que te encuentres puedes sacar unas conclusiones o unas visiones diferentes, por lo que es estupendo para volver a él repetidas veces.
Hoy recupero y os acerco cinco lecciones que Marco Aurelio nos dejó y que nos son de gran utilizad en nuestros días a pesar de que fueron escritos hace casi dos mil años:
Aunque debieras vivir tres mil años y aún diez veces otros tantos, acuérdate siempre que no se pierde otra vida de la que se vive y que sólo se vive la que se pierde. Así, la más larga vida y la más corta vienen a reducirse a lo mismo. El momento presente que se vive es igual para todos; el que se pierde, lo es también, y este que se pierde llega a parecernos indivisible. Y es que no se pierde el pasado y el futuro; pues lo que no poseemos, ¿cómo podría arrebatársenos?
Aquí, Marco Aurelio, nos remarca la importancia del presente y nos está diciendo que la cantidad de tiempo es irrelevante comparada con la calidad del momento presente y la forma en que vivimos y nos relacionamos con él. Al aceptar esta perspectiva, podemos alcanzar una vida más plena y libre de las preocupaciones por el pasado o el futuro, encontrando paz y propósito en el ahora. En definitiva, debemos de dar la importancia en el presente y dejar que el futuro llegue cuando tenga que llegar y que lo que vamos perdiendo (pasado) es inamovible.
Acuérdate que también es acto de libertad el mudar de parecer, según el aviso de quién te encamina; porque es tuya esa actividad, y procede conforme a tu voluntad y tu resolución, y, por ello, según tu propia inteligencia.
Cambiar de opinión no siempre es algo fácil de hacer pero denota inteligencia y sabiduría. Marco Aurelio, nos insta a ser valientes y a ser capaces de cambiar nuestra opinión sobre las cosas en función de nuestros conocimientos y experiencia vital. No nos debe parecer un acto de debilidad sino todo lo contrario. El mismo acto de cambio de opinión denota racionalidad y esto es un rasgo que el estoicismo busca continuamente. Nos indica que el cambio de opinión es una decisión personal y no debe ser impuesto o debe estar influenciado por otras personas. Debemos ser capaces de ser libres en este aspecto.
Que nadie te oiga quejarte de la vida que se lleva en la corte; ni te oigas tú quejarte a ti mismo.
La queja, y sobre todo la injustificada, es un recurso demasiado utilizado. Marco Aurelio nos dice que la aceptación de las circunstancias que no podemos cambiar (dicotomía estoica de control) es una virtud. Las quejas, por mucho que estén justificadas no son útiles. Nos invita a centrar nuestra energía en lo que podemos cambiar, además de dejar las quejas de lado. No solo las que hacemos a los demás sino las propias. Quejarse no sirve de nada. La acción es lo que nos hace avanzar hacia una vida mejor.
Ninguno se cansa de recibir beneficios. Pero hacerlos es una acción conforme a la naturaleza. No te canses, pues, de hacerlos, ya que así, te favoreces a ti mismo.
En este pasaje, Marco Aurelio nos habla de la generosidad como beneficio personal. Recibir es de agradecer pero el dar, ser generoso y ayudar a los demás es un acto de amor propio y hacia los demás lo que nos va a repercutir de una manera positiva en nuestra vida. El acto de dar con generosidad sin esperar nada a cambio es lo más preciado que podemos ofrecer a otro ser humano. Esta visión se basa en la creencia estoica de que todos los seres humanos formamos parte de un todo, una red interconectada donde cada acción influye en el conjunto. La creencia estoica nos empuja hacia la generosidad y la bondad.
Si alguna cosa exterior te contrista, no es ella la que te conturba, sino el juicio que te formas acerca de la misma; pero en tu mano tienes el abolir este juicio al instante.
Aquí, Marco Aurelio nos expone uno de los principios fundamentales de Estoicismo: No es lo que te sucede lo que te perturba, sino como lo interpretas.
Como humanos tenemos la capacidad para cambiar nuestra reacción a lo que nos sucede. Es una virtud, y si interiorizamos esto, nos puede salvar de mucho sufrimiento innecesario. Marco Aurelio afirma: Los hechos son neutrales, son nuestras opiniones sobre ellos los que los hacen agradables, desagradables, buenos o malos. Solo tienes que darte cuanta de que no todos reaccionamos de la misma manera a hechos similares. Esta capacidad es uno de los mejores aprendizajes que puedes sacar del estoicismo.
Esto es una pequeña pincelada de lo que este gran emperador romano nos dejó como legado. ¿Qué te parece?
Si os ha gustado, seguiré desgranando el pensamiento estoico tanto de Marco Aurelio como de sus máximos exponentes en otras entregas.
Un abrazo.
Carlos.
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Referencias
Aurelio, Marco. (2019), Meditaciones, Taurus.
REFLEXIONAR
«Elimina el juicio y habrás eliminado la queja».
PROFUNDIZAR
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Holiday, Ryan (2020), Diario para estoicos, Reverté.
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